Hábitos para cuidar tu higiene emocional
¿Dedicas tiempo a cuidar tu cuerpo y eso te hace sentir bien? Perfecto, es muy buena señal. Pero… ¿cuidas también tu higiene emocional? Si aceptas que cuerpo y mente van unidos, reconocerás que también es importante cuidar esa parte de ti: tu equilibrio emocional.

1. Causas de desequilibrio emocional.
Para estar bien necesitas salud física, y también salud emocional. Hay muchas cosas que alteran nuestra salud emocional. Las más frecuentes son:
- Problemas en el trabajo, falta de motivación, malas relaciones, mobbing…
- Dificultades en las relaciones familiares
- Falta de autoestima y/o de proyecto de vida.
- Problemas de pareja (si este es tu caso, te recomiendo descargarte esta check-list con los 7 motivos que te impiden estar mejor en pareja).
2. Cuerpo y mente: siempre en equilibrio.
A diario estás expuesto a muchísimos estímulos (noticias, compañeros de trabajo, familia…) que te provocan cantidad de pensamientos. Éstos hacen que tu organismo «ingiera» diariamente un montón de sentimientos y emociones.
Si en tu día a día generas muchos pensamientos negativos de preocupación, ansiedad, tristeza.., esto ocasionará que tu organismo pierda su equilibrio a nivel interno. Te aleja de los estados de bienestar y felicidad que obtienes cuando tus pensamientos son positivos: aceptación, paz interior, alegría…
La higiene emocional consiste en ser consciente de las emociones que tu cuerpo está sintiendo, y cuidar que las emociones con efectos negativos no se estanquen en ti. Si esto ocurre, pasan de ser emociones (que todas son buenas, porque te avisan de algo) a ser estados emocionales, más prolongados en el tiempo, y de los que es más difícil salir.

REVISA TU AUTOESTIMA CON ESTA CHECK-LIST GRATUITA
3.Hábitos para cuidar tu higiene emocional.
- Dedicar unos minutos a relajarte y observar cómo te sientes. Si te sientes mal, evalúa qué ha podido ocasionar esos sentimientos. Puedes vincularlo, por ejemplo, con momentos en que cuidas tu higiene corporal: a la hora de ducharte, lavarte los dientes… Si te animas con la meditación, te ayudará muchísimo.
- Permitirte expresar tus emociones y sentimientos. Muchos tendemos a ser más racionales que emocionales. Digamos que hemos desarrollado más nuestro hemisferio izquierdo, el más racional. Si comienzas a darle más importancia a tus emociones y tus intuiciones, podrás conectar más con lo que sientes y no tanto con los «deberías». Esto mejorará tu relación cuerpo-mente y tendrás más información para detectar aquello que no le sienta tan bien a tu organismo.
- Evitar mucho contacto con personas que se quejan demasiado, que son negativas… Las ideas que te transmiten se convierten en pensamientos que ocasionan sentimientos en tu cuerpo, aunque no seas consciente de ellos.Si una persona ha entrado en un estado emocional negativo y no hace nada por salir de él, su compañía puede resultarte muy tóxica. No le haces un favor a ella ni a ti mismo acompañándola y reforzando su toxicidad. Entiendo que cada situación es distinta; encuentra tu equilibrio.
- Detectar y depurar aquellos pensamientos que te ocasionan sentimientos negativos. Si tienes pensamientos recurrentes negativos, por ejemplo sobre tu trabajo, te vendrá bien cambiar el enfoque. Deja de valorar la situación centrándote en lo que no te gusta. Encuentra puntos que tengan algo positivo o, al menos, que te motiven para hacer un cambio en ese terreno y seguir evolucionando. Si dentro del tiempo habrá sido algo positivo, ¿por qué no verlo así desde ahora?
- Escuchar música que te haga conectar con emociones de felicidad, tranquilidad, amor… Trata de ir descubriendo nueva música dentro de los estilos que te gustan. Una música adecuada es una gran ayuda en tu higiene emocional. No te prives de ella por vagancia. Seguro que encuentras momentos en los que puedes acompañarte de buena música.
Si comienzas a utilizar estos consejos, estarás realizando una higiene mucho más completa de tu ser. Los beneficios irán llegando. Piensa en ello como el hecho de lavarte los dientes. Puede que beneficios no se noten inmediatamente, pero si dejases de hacerlo sabes que las consecuencias no tardarían en llegar.
He querido presentarte algunas formas de cuidar tu higiene emocional, para ir familiarizándote con el tema y coger el hábito. Si ves que te cuesta, es muy posible que tengas autosabotajes que bajan tu autoestima. Y con una baja autoestima, no te valoras lo suficiente como para cuidarte tanto como lo harías si te valorases de verdad.
Quizá priorizas más a los demás por encima de ti. Por eso es muy importante revisar tu autoestima. En mi curso Mente, ¡déjame amar! encontrarás 14 lecciones que te ayudarán a mejorar tu autoestima. Puedes conocerlo aquí.
A modo de resumen sobre la higiene emocional, te dejo este vídeo que grabé hace tiempo sobre este tema:
Mis libros

MENTE, ¡ DÉJAME VIVIR !
Tu mente dirige tu vida. Ella influye en las dos cosas más importantes de tu vida: tu salud y tu felicidad. Este libro es una guía, paso a paso, para construir una mentalidad que te ayude a disfrutar más de tu día a día.
Tú puedes mejorar la calidad de tu vida, de tus relaciones y de tu autoestima.
¡No lo dudes!
MENTE, AYÚDAME A DECIDIR
La calidad de tu vida depende de la calidad de tus decisiones. Si eres una persona indecisa, los demás han estado decidiendo por ti. Y eso debe cambiar, ¿no crees?
En este libro descubrirás el método de las cinco Decisiones que Importan para liderar tu vida a tu manera.
